Castillo de Montealegre
El Castillo de Montealegre sirvió de refugio a los Comuneros y terminó siendo silo de cereales. Las primeras menciones a este datan del año 967. En 1.219 la Orden de San Juan de Jerusalén le concedió el fuero a la villa y 6 años más tarde Sancho IV se lo entrega a don Alfonso de Meneses. A lo largo de la historia el Castillo de Montealegre ha cambiado de propietarios: perteneció a la Merindad de Campos, fue lugar solariego de Juan Alonso de Alburquerque y señorío de los Guzmán, cuyo escudo aún preside la entrada.La construcción del castillo, en los primeros años del siglo XIV, se enmarca en el contexto de las disputas entre los reinos de León y Castilla. Bajo la protección de doña María de Molina, los Meneses levantaron una sólida fortaleza sobre la que ya existía que, integrada en la línea fronteriza con el reino leonés, habría de convertirse en baluarte del reino de Castilla.
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El Castillo de Montealegre mantuvo su carácter defensivo hasta que los Reyes Católicos unificaron los reinos. Fue famoso por haber sido siempre inexpugnable, y es una de las fortificaciones medievales más impresionantes de la provincia de Valladolid.
El poeta de la Generación del 27, Jorge Guillén, con ancestros de Montealegre de Campos, le dedicó un poema a la fortaleza. Es un Conjunto Histórico-Artístico, cuya titularidad pertenece al ayuntamiento del municipio. Se puede visitar entre abril y septiembre los viernes, sábados, domingos y festivos.Arquitectura
La planta del castillo se articula en torno a un patio, en cuyas esquinas se alzan 4 torreones, tres rectangulares y una esbelta torre del homenaje pentagonal que se orienta hacia la llanura a lo largo de sus casi 20 metros de altura. A través de un arco apuntado se accede a una sala cubierta con bóvedas de cañón que se apoyan sobre arcos apuntados que descargan en un pilar central. En el medio de cada lienzo de muralla existe un cubo cilíndrico. Según las crónicas tuvo barreras ante sus muros y un puente levadizo que salvaba el foso existente ante la puerta principal. De planta trapezoidal, pudo ser obra de Alfonso de Meneses, debido a su torre pentagonal que recuerda a fortificaciones como las de Ayllón y San Felices. El torreón tiene su acceso, a la altura del patio de armas, bajo un arco apuntado decorado con motivos florales góticos. [caption id="attachment_312130" align="aligncenter" width="700"]