Collsacabra es una comarca natural de la Cataluña interior, situada entre Osona, la Garrocha y la Selva. Limita hacia el oeste con la Plana de Vic, al sur con el Valle de Sau y las Guillerías, al norte con la serra de Cabrera y al este con Vall de Bas y Las Planas.
Protegido entre las cordilleras Prelitoral y Transversal catalanas, Collsacabra es un altiplano con acantilados hacia el sur y levante, debidos a la erosión del Ter. De una altitud media de 1.100 m y constituido por materiales sedimentarios, el clima de Collsacabra es de tipo mediterráneo húmedo. Es una zona boscosa húmeda.
Esta preciosa cascada de más de 15 metros surge entre paredes de roca y cae formando una poza de aguas limpias y claras. De, hecho, su nombre se debe al gran agujero que se abre en la pared de roca junto a ella. [caption id="attachment_311886" align="aligncenter" width="700"]
La ruta hasta el salto de agua de La Foradada
La Foradada es un salto de agua de 15 metros de alto de una gran belleza. Se accede a ella mediante una ruta a pie. La ruta es sencilla, con poco desnivel; el camino se halla en buenas condiciones. Descenderemos por la pista ancha. No hay pérdida, ya que en el suelo aparecen unas marcas amarillas que nos guiarán hasta el torrente de Rotllada. En algunos puntos del recorrido nos vamos a encontrar con unas barandillas para que podamos agarrarnos y no resbalar o caernos. Es una ruta perfecta para realizar en verano, pues, una vez que lleguemos al salto de agua, podremos darnos un refrescante chapuzón. Además, el lugar está rodeado de árboles que proporcionan abundante sombra y frescura en la época estival. Otra época muy bonita para ver la cascada es en pleno invierno. En esta época del año, parte del agua se ha congelado por las bajas temperaturas. Por tanto, se puede disfrutar del paisaje nevado y admirar la asombrosa belleza de la cascada medio congelada. La cascada al frente, La Roca Foradada a la izquierda y las altas paredes que envuelven la gorga rodeándonos, conforman un sitio fresquito y recogido en verano. Si nos apetece explorar un poco el lugar podemos continuar la excursión hasta lo alto de la cascada. Para llegar cruzamos la Roca Foradada y subimos por la parte oculta hasta salir al lecho del torrente. Desde aquí podemos contemplar la caída de agua y caminar por el lecho de roca maciza de la riera. En definitiva la Roca Foradada es un buen sitio para pasar una calurosa tarde de verano. Los más pequeños de la casa serán los que más disfrutarán. El lugar gana espectacularidad cuando, a ciertas horas del día se filtra por un agujero un haz de luz solar que inmunda de magia el luz. [caption id="attachment_292754" align="aligncenter" width="700"]