Con la llegada de las largas y calurosas tardes de verano, no hay nada mejor que ir a uno de los parques acuáticos más grandes de toda Europa, además del segundo más grande de España, solo después del Siam Park de Tenerife. Se trata de
Aqualandia Benidorm, donde se pueden pasar unos momentos estupendos en familia aliviando el agobiante calor del verano.
Si te apetece combatir el calor de una forma divertida, disfrutar de las playas y la gastronomía de Benidorm, y descansar unos días en familia,
reserva ya aquí.
Aqualandia Benidorm
En este parque acuático puede disfrutar toda la familia al completo, desde los niños más pequeños a los mayores. Se puede vivir una auténtica fiesta acuática, ya que en
Aqualandia Benidorm, uno se lo puede pasar en grande con sus 12 piscinas, 17 toboganes, dos zonas diferentes de atracciones acuáticas para los niños, 75.000 m
2 de zonas verdes, 22.000 m
2 de aparcamiento gratuito, restaurantes, tiendas, y muchísimas cosas más.
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Fuente: Aqualandia Benidorm[/caption]
Los niños se podrán lanzar por los toboganes más altos, disfrutar de las atracciones
Big Bang y
Splas, participar en el anfiteatro con los leones marinos, contemplar los nuevos escenarios de roca y grandes cascadas que rodean sus instalaciones y divertirse al máximo con los demás niños haciendo un montón de juegos infantiles.
Servicios
Entre todas las comodidades de las que dispone el parque están las
taquillas, donde se pueden dejar todas las pertenencias para disfrutar del parque de forma cómoda. Otra de las ventajas que tiene Aqualandia Benidorm es que se pueden
adquirir las entradas por internet, para así no esperar las colas que se forman, sobre todo en los meses de julio y agosto. Además, al comprar las entradas por internet, uno se puede beneficiar de
descuentos exclusivos, además de sus ofertas para familias.
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Fuente: Aqualandia Benidorm[/caption]
Recomendaciones
Vale mucho la pena aprovechar la visita para pasar allí todo el día. No es necesario obsesionarse por llegar muy pronto, ya que el día es muy largo, y lo ideal es alargar la jornada para comer allí. Para ello, disponen de
diversos bares y restaurantes en los que se ofrecen bocadillos, pizzas, perritos, hamburguesas y muchas cosas más. También se puede llevar la comida de casa y disfrutar de ella en familia en las
múltiples zonas de pícnic distribuidas por todo el recinto.
Es fundamental no olvidarse de meter en la bolsa la crema del sol, gorras y, al menos, un bañador de repuesto, porque de estar todo el tiempo mojados, a los niños se les puede escocer la piel. Tampoco estaría mal incluir en la bolsa una crema que alivie este tipo de irritación cutánea por si los niños lo necesitan al final de la jornada.
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Fuente: Aqualandia[/caption]
En los meses de julio y agosto, si se permanece en el parque hasta última hora, se pueden ir a todas las atracciones y a los toboganes más populares y concurridos sin tener que soportar las pesadas colas. Si a lo largo de la jornada alguien ha tenido que desistir de ir a alguna atracción por la cola, quedarse hasta última hora es una opción estupenda. Para los padres más atrevidos y temerarios, no se pueden ir del parque sin probar el
kamikaze o lanzarse por el Big-Bang. A los niños les encantará verlos tirarse desde semejante altura como unos auténticos valientes.
No es necesario estar todo el día preocupados por los niños que no saben nadar de forma correcta, ya que hay
socorristas en cada una de las atracciones velando constantemente porque todo el mundo cumpla las normas y, en caso de algún percance, hay una zona de primeros auxilios. Además, disponen de cajeros automáticos, varias zonas de aseos y una tienda de regalos.
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