Si aún no habéis visitado
la capital de España, desde Sapos y Princesas os proponemos un recorrido con el que tanto mayores como pequeños podréis disfrutar al máximo de todo
lo imprescindible de esta vibrante ciudad en dos días. Desde pasear por sus calles y parques más destacados a visitar alguno de sus fantásticos
museos, ¡hay mucho que descubrir en 48 horas en Madrid!
Día 1 de las 48 horas en Madrid con niños
Para que puedas tener una idea general de la ciudad, te recomendamos tomar un autobús turístico (
encuéntralo aquí).
La Puerta del Sol
Independientemente de donde se encuentre vuestro alojamiento, lo primero que debéis ir a visitar es la céntrica
Puerta del Sol. Cuando lleguéis, podéis recomendarles a los más niños a jugar a las pistas y que encuentren los
estandartes de esta famosa plaza. Podéis comenzar por el
Km 0, desde el cual parten las carreteras principales de España, e inmortalizar este momento con una foto de los pies de toda la familia.
Después podéis buscar los otros grandes emblemas de la plaza:
el Oso y el Madroño y el famoso
cartel de Tío Pepe, ¡a ver si los encontráis! Por supuesto, entre unas cosas y otras, os animamos a empaparos
de la vida y el trajín de la Puerta del Sol: animaciones, espectáculos o manifestaciones, lo que toque. La plaza respira vida y en ella os sentiréis como un auténtico madrileño. Además, si os apetece desayunar, la famosísima pastelería La Mallorquina os ofrecerá todo tipo de delicias dulces (y saladas) para que comencéis el día con energía.
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Puerta del Sol | Fuente: Canva[/caption]
La plaza Mayor
Una vez hechas las fotos y explicado lo que significa esa plaza, podéis tomar una de las calles que sale de ella y que es, a su vez, una de las más antiguas e importantes de la ciudad: la
calle Mayor. Por ella tenéis diferentes accesos a la
imprescindible plaza Mayor. Animaciones, terrazas y música están aseguradas; e incluso si tenéis suerte, podéis encontraros con mercadillos o conciertos debido a alguna celebración especial.
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Plaza Mayor de Madrid | Fuente: Canva[/caption]
No hay nada más castizo que el
aperitivo de mediodía y, como se está acercando la hora, os proponemos varias opciones. En los bajos y alrededores de la plaza Mayor, encontraréis varios sitios míticos para degustar el archiconocido
‘bocata de calamares’ y, si sois más sibaritas, podéis reponer fuerzas en el
Mercado de San Miguel, un antiguo mercado reformado, con multitud de
opciones gastronómicas.
La plaza de España
Una vez saciados, os invitamos a continuar admirando la belleza del
Madrid de los Austrias, toda esa zona que se encuentra en los alrededores de la plaza Mayor y Ópera. Desde allí, lo mejor es continuar hasta llegar al
Palacio Real y seguir con un paseo vespertino por los preciosos jardines de Sabatini.
Vuestros pies os llevarán después a la
plaza de España, donde está el célebre edificio España que, aunque no es el más alto de la capital, sus 117 metros imponen bastante.
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Plaza de España | Fuente: Canva[/caption]
Parque del Oeste y Casa de Campo
Desde allí, os animamos a continuar hasta el
parque del Oeste, y admirar las magníficas vistas hasta la
Casa de Campo, un jardín histórico y el mayor parque público del municipio, una idea perfecta si vais a visitar Madrid con niños.
Cogiéndolo de ida y vuelta, a vuestro regreso al parque del Oeste tendréis el broche perfecto a un intenso día: la puesta de sol en el
Templo de Debod, una
preciosa construcción egipcia donada a España en 1972.
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Templo de Debod, Madrid | Fuente: Canva[/caption]
Día 2
Después de una jornada titánica, la segunda se presenta
llena de cultura y con muchas sorpresas.
Sus grandes museos
Empezar dando una vuelta por el paseo del Prado es una fantástica idea. Y allí podréis visitar alguno de sus
importantes museos: el
Museo del Prado, el
Reina Sofía, el
Thyssen-Bornemisza o
CaixaForum. Además de disfrutar de la belleza de sus exposiciones, muchos de estos centros de arte tienen
programas dirigidos a las familias, con los que los niños, además de divertirse, aprenderán un montón. Si estuvierais interesados, os recomendamos informaros con antelación en su página web, ya que muchos de ellos requieren reserva previa.
Después de una mañana con mucho arte, os invitamos a visitar la
Cuesta de Moyano, donde pasaréis un rato muy agradable rebuscando entre los libros de sus
puestos, muchos de segunda mano, mientras dais un
agradable paseo. Aquí los niños podrán adquirir sus cómics favoritos.
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Museo del Prado | Fuente: Canva[/caption]
El Retiro
Tras subir la Cuesta de Moyano, entraréis en el
parque del Retiro, el pulmón de Madrid y uno de los parques más bellos de nuestro país. Podréis pasear en las
barquitas del lago, visitar el mágico
palacio de Cristal o ver una actuación de
teatro de títeres. Para terminar la visita, os recomendamos salir por una de sus zonas más bonitas, los Jardines de Cecilio Rodríguez, donde veréis una gran cantidad de pavos reales mostrando sus hermosas plumas.
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Palacio de Cristal en el parque del Retiro | Fuente: Canva[/caption]
Y si os sobra tiempo antes de volver a casa, os recomendamos que visitéis
Madrid Río, un maravilloso
parque que recorre la orilla del Manzanares. Sus famosos
toboganes, puentes y la zona de ‘playa’ os harán pasar un rato de lo más divertido.
