Cómo transmitir los valores de la Navidad a los niños
A continuación, os presentamos unas cuantas propuestas para enseñar los valores de la Navidad a los más pequeños que se pueden poner en práctica perfectamente en la escuela infantil:1. El valor de la solidaridad
Casi por definición, esta es una época para compartir con los demás, tanto con los seres queridos como con las personas que viven con carencias. ¿Cómo transmitirles este mensaje a los niños? Pues organizando actividades que les permitan darse cuenta de que hay otras personas que necesitan de nosotros, ya que por sí mismas no pueden adquirir los bienes que nosotros tenemos. Por ejemplo, organizar una recogida de alimentos, juguetes o ropa para los más desfavorecidos. Es muy habitual que en las escuelas se implique a los padres en este tipo de iniciativas, en las que se organiza, por ejemplo, un ‘carro solidario’. Pero lo más importante es que el niño participe en ella totalmente, no solo que la familia aporte algo. Es decir, que acompañe a sus padres cuando vayan a comprar el producto al supermercado, que lo lleve él primero a casa y luego a la escuela, y que lo deposite en el lugar dispuesto para ello. [caption id="attachment_613910" align="aligncenter" width="700"]
2. La generosidad
Aunque se trate de una virtud humana íntimamente relacionada con la anterior, se le puede dar una connotación diferente a la hora de trabajarla en clase. Por ejemplo, pedir a los niños y niñas que donen un juguete que les encante. Si consiguen tomar la decisión de quedarse sin él, aprenderán, además, el valor del desprendimiento. Esto es, ser capaces de renunciar a algo que nos gusta mucho, aunque nos duela, para ofrecérselo a alguien que lo necesita más que yo. Una forma de llevar a la práctica esta propuesta de generosidad podría ser pedirles que lleven a la escuela uno de sus juguetes preferidos. Después de dejarlos todos en el centro del aula, que cada niño tome uno que no sea el suyo, se lo lleve a casa y lo devuelva después de unos días, o a la vuelta de las Navidades. Es una forma de transmitir que a veces tenemos que desprendernos de algo nuestro en favor de los otros. [caption id="attachment_613911" align="aligncenter" width="700"]
3. La gratitud
Como son unas fiestas que se celebran al terminar el año, suponen el final de un ciclo, lo que invita a la reflexión y a expresar el agradecimiento por todo lo que tenemos, sea material o no. ¿Cómo se puede practicar la gratitud en la escuela infantil? Con los niños también es posible realizar actividades de reflexión. Por ejemplo, lanzando una pregunta sencilla: '¿Qué tenemos?' Tenemos una casa, un coche o una bici. Pero también tenemos unos abuelos, unos primos con los que jugar o una mascota a la que queremos mucho. A continuación, se puede preguntar '¿Qué no tienen otros que tenga yo?', y así ir elaborando un conjunto de imágenes que les hagan pensar lo agradecidos que deben estar por lo que tienen, y que no solo se trata de objetos. [caption id="attachment_613912" align="aligncenter" width="700"]
4. El respeto
Al igual que todas las normas que deben regir el comportamiento humano, esta también tiene que tratarse a lo largo del año. Pero, dado que estamos en un tiempo de reuniones y fiestas en las que es necesario compartir momentos con más gente, es fundamental trabajar el respeto al otro, lo que posibilitará la convivencia, a la vez que fomentará el valor de la amabilidad. La Navidad es un periodo ideal para reforzarlo e inculcar que, aunque entre nosotros existan diferencias, no por eso somos mejores que los demás. En el aula, el respeto se pone de manifiesto muy bien practicando el diálogo y la escucha activa. Poner especial atención en transmitirles que mientras uno habla, los demás escuchamos en silencio y hasta que no toque el turno no intervenimos les ayudará, además, a cultivar la paciencia. [caption id="attachment_613913" align="aligncenter" width="700"]
5. La paz
No se trata de hablar de paz únicamente como contrapunto a las guerras. En una época tan conflictiva como esta, deseamos que las guerras acaben pronto, cuando ni siquiera tendrían que haber empezado. Para intentar evitar estas incoherencias del ser humano, debemos inculcar en los más pequeños la tranquilidad, la escucha, la no provocación verbal, la capacidad de aceptar la frustración. Unidos a estas pautas de conducta, están el valor del diálogo y el del orden. La asertividad es una habilidad de ciertas personas que les permite transmitir y defender sus ideas y sus derechos respetando los de los demás, de una forma directa pero sin recurrir a la agresividad. Para trabajar la paz en el aula, los niños y niñas deben entender que los conflictos que se generan entre ellos no sirven para nada. Que la 'pequeña guerra' que se crea cuando se ponen nerviosos y agresivos no conduce a nada bueno. Y aprender a ponerle fin, a pedir disculpas —el valor de la humildad— y a resolver las disputas de manera pacífica, con respeto, sin insultos y evitando la violencia. Si no quieren seguir jugando juntos una vez resuelto el problema, no pasa nada, pero la disputa personal se ha solucionado. Es una buena idea entrenarse para la paz preparando un mural que recuerde que la clase tiene que ser un lugar lleno de tranquilidad, de risas y de juego, en ningún caso de discusiones. [caption id="attachment_613914" align="aligncenter" width="700"]
6. El amor
Amor es una de las palabras más repetidas en Navidad, pero debemos tener en cuenta que constituye un concepto mucho más grande que la idea efímera que tenemos de él en esta época, porque a menudo, una vez pasadas las fiestas, parece que se olvidan los buenos propósitos. [caption id="attachment_613915" align="aligncenter" width="700"]
7. La familia
A veces puede parecer que nos acordamos de que tenemos familia solo en el periodo navideño. Es importante que los niños y niñas sepan que hay que disfrutarla a lo largo de todo el año y no solo en esta época. [caption id="attachment_613916" align="aligncenter" width="700"]

Verónica García Notario Directora de la Escuela Infantil Delphos Centro de Educación Infantil asociado a ACADE
