Para que tu hijo se sienta querido
El amor es la más poderosa fuente de autoestima. Por eso, aunque probablemente ya lo sepan, es crucial que se lo transmitamos. Podemos hacerlo a través de gestos y, sobre todo, con nuestras actitudes. Pero también es fundamental que lo verbalicemos expresamente. Las frases para mejorar la autoestima siempre están relacionadas con el cariño. Los niños necesitan sentirse amados y también escuchar de nosotros que los queremos muchísimo. Saber que estaremos ahí para ellos de manera incondicional, aunque a veces les surjan dudas si han hecho algo mal o no se han portado como hubiésemos esperado. Estas son algunas de las frases que les podemos decir para afianzar en ellos el sentimiento de amor que les tenemos:- Te quiero.
- Eres lo más importante para mí.
- Me alegra que seas mi hijo.
- Siempre estaré a tu lado.
- Estoy muy orgulloso de ti.
- Eres muy especial.
- Me importas.
- Siempre puedes contar conmigo.
- Yo siempre estaré ahí para ayudarte.
- Eres único, no hay nadie como tú.
- Eres importante, no solo para mí.
- Me gusta mucho cómo eres.
- Eres un niño estupendo.
- Espero que estés orgulloso de ti mismo, porque yo lo estoy.
- Me encanta tu compañía.
- Eres increíble.
- Significas mucho para mí.
- Me haces muy feliz.
- Iluminas mi día.

Frases para aumentar la autoestima ganando confianza en sí mismo
La confianza es también un pilar fundamental en el desarrollo de una autoestima saludable. Y para que los niños ganen seguridad en sí mismos, es preciso que sientan que nosotros la tenemos hacia ellos. Un niño que sabe que cuenta con la confianza de sus padres estará mucho más seguro a la hora de hacer cualquier tarea, incluso en el caso de que aparezcan dificultades. En este sentido, ofrecerles la posibilidad de tomar decisiones y atribuirles tareas los hará más autosuficientes e independientes, además de transmitirles el mensaje de que confiamos en ellos. Algunas frases para aumentar la autoestima están dirigidas a otorgarle a tu hijo o hija capacidad y seguridad. Por ejemplo:- Confío en ti.
- Eres capaz.
- Yo sé que tú puedes.
- Inténtalo tú solo. Sé que puedes hacerlo.
- Atrévete. No importa si ganas o pierdes. Solamente diviértete y aprende.
- Sé que puedo confiar en ti.
- Inténtalo, no permitas que el miedo te venza.
- Haz esta tarea. Sé que lo harás bien.
- Me has demostrado que eres responsable.
- Confía en ti mismo.
- Sabía que podías hacerlo.
- ¡Muy bien! Ya lo haces tú solo.

Para que se sienta escuchado
Debemos demostrar a nuestros hijos que los escuchamos y que nos interesamos por aquello que les preocupa. Los niños tienen, desde muy pequeños, sus gustos y opiniones propias, y precisan de interés por parte de sus padres. Necesitan saber que sus preocupaciones tienen valor para ti y que su opinión también cuenta. Además, de esta manera, estaremos propiciando una buena comunicación familiar que hará que nos confíen, no únicamente sus opiniones, sino también sus emociones. Invalidar sus emociones puede tener consecuencias muy negativas para su autoestima. Debemos darles el valor que se merecen y proporcionarles siempre comprensión. Estas son algunas frases que puedes decirle para que se sienta escuchado y libere sus emociones:- Entiendo cómo te sientes.
- Te escucho.
- Me interesa mucho lo que me estás contando.
- Entiendo por lo que estás pasando. Estoy aquí para lo que necesites.
- ¿Qué opinas sobre esto?
- Te comprendo.
- Tienes razón.
- Me gusta que me preguntes cosas.
- Esa pregunta es muy interesante.
- Me gusta mucho cómo piensas.
- Tienes buenas ideas.
- ¿Tú que crees?

Para que sepa que valoramos su esfuerzo
Si quieres que tu hijo crezca con unos pilares sólidos en cuanto a autoconfianza, es muy importante que reconozcas su esfuerzo y lo valores del modo que le corresponde. Hacerlo de manera verbal hará que le llegue el mensaje. Con estas frases para aumentar la autoestima, lograrás transmitir a tus hijos el reconocimiento por el esfuerzo realizado:- ¿Me puedes enseñar cómo lo hiciste?
- Me gusta cómo lo has hecho.
- ¿Cómo lo conseguiste? No ha debido de ser fácil.
- A mí me hubiera costado mucho hacer eso.
- A pesar de todas las dificultades que has tenido, lo has conseguido.
- ¡Bien hecho! Sabía que ibas a ser capaz.
- No sé cómo lo has hecho, pero está estupendo.
- Continúa así.
- Mira lo que has logrado con tu esfuerzo.
- ¡Buen trabajo!
- ¡Así se hace!
- Vas muy bien.
- Puedes intentarlo de nuevo.
- Te has esforzado y eso es lo importante. La próxima vez saldrá mejor.
- No pasa nada. Todos nos equivocamos. Así es como aprendemos.
- Equivocarse es bueno. Te enseña a mejorar.
- No podemos ser buenos en todo. Cada uno tiene sus talentos.

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