Preparar a los alumnos del siglo XXI para el mercado laboral se ha convertido en un gran desafío para la mayoría de los centros educativos. No solo tienen que preparar a los alumnos como antaño para su futuro laboral sino que deben incorporar nuevos aprendizajes como las destrezas digitales o el fomento del emprendimiento. En enero de 2018 la Comisión Europea (CE) presentó una serie de recomendaciones para fomentar el aprendizaje de nuevos aspectos clave en la educación en la Unión Europea. El tercer pilar de estas recomendaciones se centra en la formación continua, con "especial atención a la promoción del emprendimiento y a los modos de pensar orientados a la innovación, el potencial personal, la creatividad y la iniciativa propia". Ese planteamiento refuerza también el interés de Bruselas en preparar a los alumnos para tener éxito en mercados laborales cambiantes como ciudadanos de "sociedades más diversas, móviles, digitales y globales".

Una preparación eficaz

Para lograr que los alumnos estén preparados para su futuro laboral tienen que adquirir según los profesionales ciertas habilidades como por ejemplo la autonomía, el espíritu emprendedor o una alta adaptación a los cambios. También se debe reforzar la formación profesional y las alianzas con las empresas. En la II Edición de los Premios Me hemos charlado con algunos de los finalistas a  la categoría Mejor profesional de Marketing Educativo sobre cómo debería ser esta preparación.

1. Un alumno más autónomo

Una de las formas de combatir el alto desempleo juvenil puede ser ayudar a los alumnos a ser más autónomos. Para Ana Mª Pérez del Conservatorio de Música y Danza de Gijón se debe “lograr que el alumnado sea más autónomo, más emprendedor, más creativo. Animándoles a pensar, a buscar soluciones, potenciando una actitud crítica positiva, provocando que se conviertan en adultos proactivos en vez de reactivos”.

2. Más Formación Profesional

La Formación Profesional se está convirtiendo en muchos países europeos como Alemania en una de las armas más eficaces en la lucha contra el desempleo juvenil. Para Mauriz Vidal de la Escola Montserrat, FP “la formación profesional es empleo y para muestra un botón: los alumnos que tienen un título de formación profesional tienen muchas más oportunidades laborales que los que no lo tienen”. La Formación Profesional abre muchas puertas, nos comenta. “De hecho los estudios de inserción laboral así lo demuestran. En cualquier persona que tenga formación profesional, ya sea con un título de grado medio o grado superior, su insertabilidad laboral aumenta exponencialmente. Por poner un ejemplo: en el último estudio de inserción laboral que hemos hecho en la escuela, los alumnos graduados que se encuentran en paro son sólo el 5%, mientras que el paro juvenil actualmente se encuentra en un 30%”.

3. Una buena opción

Aunque durante muchos años no ha sido elegida como una opción por muchos jóvenes, en la actualidad se ha convertido en fundamental para la creación de empleo en muchos países europeos. En nuestro país aunque ya se ha ido ganando peso los ciclos formativos, sobre todo los superiores, para Mauriz Vidal de la Escola Montserrat, FP “todavía estamos un poco lejos de algunos países de Europa donde la elección de los alumnos una vez acaban sus estudios obligatorios es del 50% bachillerato y 50% formación profesional. Tenemos que seguir trabajando desde los centros educativos y desde las instituciones para prestigiarla aún más y para darle la relevancia que realmente tiene”. Para Juan de Dios Marín Peñas, responsable de la Formación Profesional en Comercio Internacional en IES Luis de Góngora la formación profesional es fundamental: “Creo que aún no nos hemos quitado ese lastre del pasado. Hoy la formación profesional es especialización, precisamente lo que pide el mundo laboral. El bachillerato da acceso a la universidad desde la generalidad y la formación profesional aporta especialistas al mundo laboral y a la universidad”.

4. Alianzas con empresas

La transición del sistema educativo al mundo laboral tiene que apoyarse de alianzas y proyectos con diferentes empresas. Jorge Ortega Villamiel del Colegio Diocesano Santa Clara de Toledo se debe hacer “a través de alianzas con empresas, mediante periodos de prácticas o de formación en centros de trabajo de calidad, con el fin de mejorar la transición del sistema educativo al mundo laboral”.

5. Nuevas habilidades

Los alumnos que más oportunidades tendrán en el mercado laboral serán aquellos que hayan desarrollado nuevas habilidades en su vida escolar. Para Ana Mª Pérez del Conservatorio de P. De Música y Danza de Gijón los alumnos deben tener capacidad de escucha, habilidad para debatir, interés plantear sus propios retos y las estrategias para superarlos, trabajo en equipo y habilidades sociales e inteligencia emocional. Para Juan de Dios Marín Peñas del IES Luis de Góngora los alumnos deben tener capacidad resolutiva, adaptación al cambio, formación continua, inquietud por aprender y perseverancia. "Nosotros dentro de nuestro centro educativo trabajamos 5, y son estas 5 porqué hicimos en su día un trabajo conjunto entre empresas y claustro en el cuál detectamos que las cinco competencias o habilidades que podrían ser más útiles a nuestros alumnos son autoconocimiento, creatividad, organización, trabajo en equipo y comunicación", nos explica Daniel Mauriz Vidal de la Escola Montserrat de FP. Para Jorge Ortega Villamiel Colegio Diocesano Santa Clara de Toledo sin embargo tienen que adquirir habilidades como pensamiento crítico, trabajo en equipo, creatividad, dominio de las TIC y expresión oral y escrita. El éxito en el mercado laboral de los alumnos está definido en la mayoría de las ocasiones por su formación en Secundaria, Bachillerato y Ciclos Formativos. Fomentar estas nuevas habilidades desde que son pequeños será fundamental para los alumnos del futuro. No lo dudes.