Muchas personas desconocen que
la dieta puede tener un impacto significativo en la salud visual de los adultos. Pero lo cierto es que hay determinados
alimentos que pueden ayudar a prevenir enfermedades comunes como la degeneración macular, las cataratas y la sequedad ocular, algo que redundará en una buena calidad de vida.
La importancia de una dieta completa para la salud visual
Una alimentación variada y equilibrada, rica en nutrientes esenciales para el mantenimiento y funcionamiento adecuado de los ojos, es básica para:
1. Prevenir enfermedades oculares
Constituye una buena forma de disminuir el riesgo de desarrollar enfermedades oculares, como
la degeneración macular relacionada con la edad, las cataratas y el glaucoma.
2. Proteger la retina
La retina es una parte muy importante del ojo, pues es responsable de la percepción visual. Algunos nutrientes, como la
vitamina A, la luteína y la zeaxantina, son esenciales para protegerla de los daños causados por
la luz azul y otros factores ambientales.
3. Mejorar la visión
Una dieta rica en compuestos químicos esenciales también permite que mejoren ciertas funciones, como
la agudeza visual, la capacidad para adaptarse a la oscuridad y la percepción de los colores.
[caption id="attachment_591842" align="aligncenter" width="700"]

La prevención y las revisiones resultan básicas | Fuente: Canva[/caption]
4. Mantener los ojos hidratados
La sequedad ocular es un problema bastante común en adultos mayores. Una dieta equilibrada que incluya alimentos con una elevada presencia de
ácidos grasos Omega-3 y vitamina C ayuda a que nuestros ojos se mantengan hidratados.
5. Reducir el riesgo de enfermedades sistémicas
Muchas enfermedades sistémicas, como
la diabetes y la hipertensión arterial, pueden afectar seriamente a los ojos. Y una nutrición saludable y equilibrada reduce el riesgo de desarrollar este tipo de afecciones y, por ende, disminuye las posibilidades de padecer problemas oculares asociados a ellas.
Alimentos que favorecen la salud visual de los adultos
Para alcanzar los beneficios descritos anteriormente, no deben faltar en nuestra dieta:
Las verduras de hoja verde
Las verduras de hoja verde, como
las espinacas, la col rizada y las acelgas, contienen altas cantidades de
luteína y zeaxantina, dos antioxidantes que se encuentran en la retina. Sirven para proteger el ojo del daño causado por la luz azul y la degeneración macular relacionada con la edad.
[caption id="attachment_591829" align="aligncenter" width="700"]

Incluye espinacas y otras verduras de hoja verde en tus platos | Fuente: Canva[/caption]
El pescado azul
Los pescados azules, especialmente
el salmón, el atún y las sardinas, son una excelente fuente de Omega-3, como el ácido docosahexaenoico (DHA) y el ácido eicosapentaenoico (EPA). Estas sustancias ayudan a reducir la inflamación en todo el cuerpo, incluyendo los ojos, y disminuyen el riesgo de degeneración macular y sequedad ocular.
[caption id="attachment_591830" align="aligncenter" width="700"]

El salmón y otros pescados azules aportan grasas buenas a nuestro organismo | Fuente: Canva[/caption]
Los huevos
Son una excelente fuente de
vitamina A y de zinc, un mineral que facilita el transporte de esta vitamina desde el hígado hasta la retina. La vitamina A es necesaria para la función visual normal y permite la producción de pigmentos en la retina. Su deficiencia puede causar ceguera nocturna, xeroftalmia y otros trastornos oculares.
[caption id="attachment_591832" align="aligncenter" width="700"]

Los huevos proporcionan proteínas de excelente calidad biológica, zinc y vitamina A | Fuente: Canva[/caption]
Las frutas y bayas
Los
cítricos, las fresas, los arándanos y otros frutos rojos aportan mucha
vitamina C, con demostrado poder antioxidante, que protege las células del ojo del daño causado por los radicales libres y reduce el riesgo de cataratas y de degeneración macular asociada a la edad. Además, los arándanos también contienen
antocianinas, que son antioxidantes que disminuyen la inflamación y mejorar la salud ocular.
[caption id="attachment_591833" align="aligncenter" width="700"]

Las fresas, las frambuesas y los arándanos son buena fuente de antioxidantes | Fuente: Canva[/caption]
Los frutos secos y las semillas
Los frutos secos como
las nueces y las almendras contienen buenas cantidades de
vitamina E, que ayuda a proteger las células del ojo de los daños provocados por los radicales libres. Además, también son buena fuente de ácidos grasos Omega-3.
[caption id="attachment_591835" align="aligncenter" width="700"]

Utiliza las nueces y las almendras en tus ensaladas y otros platos | Fuente: Canva[/caption]
En resumen,
la dieta juega un papel decisivo en la salud visual de los adultos. Al incluir alimentos ricos en nutrientes que intervienen directamente en el buen estado de los ojos, contribuyes a la prevención de enfermedades oculares comunes y consigues que tu calidad de vida sea mejor. Recuerda que siempre es importante consultar con un especialista en nutrición o un médico antes de hacer cambios significativos en tu dieta.