Calafell Slide es un tobogán gigante de trineos que tiene un recorrido total de 700 metros, una fantástica atracción para toda la familia, segura y divertida. Está situado en la montaña frente al pueblo de Calafell, para acceder a él debemos llegar por la carretera de Bellvei. Es fácil, seguro y muy divertido. El propio conductor es el que controla la velocidad del trineo disfrutando de la inercia que coge en las curvas, el mecanismo es tan sencillo que a partir de 8 años los niños pueden subir solos y entre los 3 y 7 acompañados de un adulto. El menor se situará delante y el conductor que controla el freno detrás. La velocidad debe adaptarse para que no haya peligro ni para uno mismo ni para terceras personas por lo que tendremos que mantener una distantica mínima de seguridad con el trineo precedente de 25 metros. Está terminantemente prohibido chocar con otro trineo, el conductor que haya provocado el choque será el responsable. Está prohibido sacar brazos o piernas, tocar la pista o arrodillarse.

El tobogán no funciona con humedad o hielo, es mejor acercarse en la época estival o primavera. No es apto para mujeres embarazadas o personas con movilidad reducida, por temas de seguridad. Las instalaciones cuentan con un bar y terraza con dos barbacoas a disposición de los clientes. El uso de las barbacoas y las mesas es libre siendo obligatorio el consumo de  bebidas en el Calafell Slide Bar. La comida la debe llevar uno mismo.

Desde este punto hay unas vistas espectaculares del mar. ¡No te olvides la cámara de fotos! Organizan fiestas de cumpleaños y tienen precios especiales para colegios y grupos. Una atracción diferente con mucha adrenalina apta para toda la familia, ¿serás capaz de tirarte una sola vez?